sábado, 15 de febrero de 2014

13.-PROPONER LA FE CRISTIANA… como hogar de una gran familia.



Caminé hacia la casa de familia y me sentí reconfortado en el hogar más entrañable, junto a los seres más queridos.

Caminé hacia la casa del campo y me envolví entre las fragancias de hierbas y árboles que me conectan al hogar de la naturaleza.

Caminé hacia la casa de mi pueblo y me encontré con las raíces de mi historia
 escrita en las personas que forman parte de mi hogar y de los lugares donde transcurrió mi infancia.

Caminé hacia la casa rural y conviví con familias de amigos con las que se va formando un hogar porque vamos creciendo en unión de afectos, de confianza y de ayuda.

 Caminé hacia la casa del sol naciente y escuche las músicas que venían de horizontes lejanos desde el hogar más remoto de la humanidad.

Caminé hacia la casa del restaurante donde se reúnen los comensales en armonía
de hogar, festejando grandes acontecimientos familiares donde nunca faltan alimentos  para todo.

Caminé hacia la casa del diálogo donde las familias comparten las ideas y opiniones en un ambiente de hogar respetuoso, donde la sensibilidad une las diferencias.

Caminé hacia la casa de cultura donde nacen iniciativas de formación, de ocio y tiempo libre  en un ambiente de hogar y bienestar. 

Me acerqué a una comunidad cristiana y me sentí acogido en el hogar de la casa  familiar, donde se expresan todas las características de las otras casas; porque allí hay unas personas que se reúnen en nombre de Jesús. Aquí descubren su presencia en el amor de unas familias a otras. Esto hace posible que sea el hogar, por excelencia, de la única familia de los hijos del Padre-Dios.
El evangelio de Jesús es el hilo que une en la diversidad familiar, y es el corazón que da fuerza a esa gran familia, donde hay siempre un sitio para todos.  

¿Desde dónde te sitúas?

 Puedes enviar tus reflexiones a esta dirección: florentinoescribano@yahoo.es
                                                    
Hasta la próxima semana,

Tino Escribano  Ruiz

4 comentarios:

  1. Que dos palabras tan bonitas y entrañables has escogido esta semana.
    HOGAR Y FAMILIA.
    Yo en mi hogar, propiamente dicho, estoy feliz pues se que a el vienen mis hijos y mis nietos a verme porque tambien es su hogar.
    En mi hogar estoy tranquila pues se que no va a pasarme nada, que puedo caminar por él con la seguridad de que estoy en mi casa, aunque tenga las puertas abiertas a todo el que quiera o necesite entrar.
    Para mí eso era el hogar y la familia, hasta que descubrí que hay otra clase de familia y otro hogar que aunque no llevemos el mismo ADN, son tan importantes para mi como los otros con los que si lo comparto. Es la comunidad de mi parroquia, digo mia, porque la considero mi casa.
    Se que en ella encuentro lo que estoy buscando cada dia, reforzar mi fe, creer que se puede vivir en otra familia intentando ayudar, lo mismo que haces con tu familia de sangre. Alli esta JESUS diciendo, ven que yo te acojo como hija mia y de verdad se siente una paz y unas ganas de estar alli compartiendo con los demas como si fueran tu autentica familia, pues es cierto que es la casa del PADRE, espero seguir incrementando mi fe y cada vez considero mas mía la comunidad y la familia que de ella se desprende.
    Hasta la proxima.

    Flor.

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  2. Enhorabuena por los avances que has hecho. Cuando una persona es capaz de vivir en la comunidad cristiana como prolongación de la comunidad de su sangre, es que se ha realizado una transformación que no proviene de estrategias humanas sino de la fuerza de la fe en Jesucristo. Por ahí empieza a construirse la nueva humanidad y las nuevas relaciones entre la familia de los hijos de Dios.
    Habrá batacazos, como en las mejores familias,no vamos a ser ilusos; pero siempre habrá oportunidades para intentarlo de nuevo y crecer, crecer y crecer en todas las dimensiones humanas... la fe cristiana es así y además gratis y sin hacer cosas raras. ¿Cuándo lo van a entender las generaciones actuales tan sofisticadas? ¿Qué más tenemos que hacer para que lo vean?

    Saludos y adelante: Tino

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  3. Tino, mi sitio son las manos de mi padre me recuerda esas manos trabajadas con ilusion para llevar adelante a los hijos pues heramos nueve y todos pequeños pero,las manos callosa de tanto trabajar pues su trabajo fue de toda la vida ebanista la verdad es que el trabajaba para sacar a los hijos adelante ya que las necesidades heran muchas pero todos en comunidad y con la ayuda de Jesus salimos para adelante con el cariño que el ponia en su trabajo y nosotros ayudandole en todo lo que podiamos pero con la ayuda de la falimiA salimos bien empezamos ya a trabajar en lo que podiamos y con laayuda de mi madre que se desvivia por todos nosotros con su amabilidad y su amor de madre nos fuimos haciendonos mayores y con ganas de tener un padre con sus manos callosa de tanto trabajar esas son las manos que tanto las hecho de manos un saludo y que sigas adelante con tu ventana para ver de cerca al que tanto queremos que es JESUS un saludo y hasta la proxima vez.
    Maxi y Angelita

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    1. Fenomenal,Maxi, genial, casi me haces llorar porque en lo que has descrito de tu padre es idéntico a lo del mío. Ambas manos llevan mucho amor y mucha fe.Así se aprende a vivir la fe cristiana. Bueno,Maxi,hasta lapróvaban mucho amor y mucha fe.Así debemos vivir en la fe cristiana.Gracias y hasta la próxima, si la ponen, pues me han dicho que ese espacio se necesita para otra cosa.
      Tino.

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