Viajé
por el cosmos en los espacios siderales de galaxia en galaxia, buscando el
sitio donde habita la eternidad, pero
solo encontré retales de silencio.
Viajé por los planetas entre espacios
infinitos buscando el hogar donde habita la eternidad, pero solo encontré distancias llenas de vacío.
Viajé por los rayos del sol y las estrellas, defendiéndome de su calor abrasador,
buscando el haz de luz que envuelve a la
eternidad, pero solo encontré
brillos que escondían oscuras sombras.
Viajé por los alrededores de la luna, buscando la espiral de la eternidad entre la poderosa fuerza magnética
que atrae a los objetos; pero solo encontré destellos de color plateado que anunciaban malos presagios.
Viaje por los caminos de la tierra, de día y de
noche, buscando la residencia donde la
eternidad tiene su casa, pero no encontré más que caminos de un viaje a ninguna parte.
Viaje por los espacios interiores del pensamiento
acumulado en la historia de la humanidad, buscando la neurona donde reside la eternidad, pero no encontré más que teorías
que perciben descripciones sobre la conectividad.
Viajé
al centro de la vida de una comunidad cristiana y encontré ahí la
eternidad en los contenidos de la fe en Jesucristo, nacido en la
tierra desde la eternidad del Padre-Dios. El evangelio es la guía para
descubrir destellos de eternidad en el planeta, donde nadie es dueño de
la tierra
pero sí somos sus hijos, de paso por la tierra, construyendo caminos que
conducen a vivir para siempre en la eternidad de Dios.
¿Desde dónde te
sitúas?
Puedes enviar tus reflexiones a esta dirección: florentinoescribano@yahoo.es
Hasta la próxima semana.
Tino Escribano Ruiz
En la celebración del Sabado, encontré a la Comunidad unida por el amor y el recuerdo a Rafa Hernando.
ResponderEliminarMe ilusionó y me enterneció, ver a las personas que asistieron, unidas en Jesús que es el camino, la verdad y la vida.
Grcias pro tus ventanas Tino.
Un amigo.
Eluva.
El viaje de Rafa fue hacia la eternidad, pero antes estuvo sacando el billete con sus buenas acciones por la tierra. Yo también viví algo especial el día de su aniversario en esa comunidad donde él nos dio lo mejor de su vida.
ResponderEliminarTino: Segun mi humilde opinion, la mente humana no es capaz de llegar a esos sitios tan desconocidos e inmensamente lejanos.
ResponderEliminarJ.M.
Tienes toda la razón.Con la mente no se puede llegar, pero con el conocimiento de la fe cristiana, se puede conseguir. Esa es la experiencia de vida que nos propone Tino desde sus ventanas. Yo lo estoy intentando y me siento muy bien porque tengo ante la vida un horizonte más amplio. Inténtalo, pues vale la pena.
ResponderEliminarSaludos de A. Castela.
Yo no se como se te ocurre viajar,aunque sea con la mente,por esos sitios tan raros para buscar una eternidad que solo la puedes encontrar en DIOS-PADRE. Esta semana me he quedado un poco flipada con tu proponer la fe cristiana, cuando todos sabemos que la FE no hay que buscarla, te la da JESUS gratuitamente, eres tu el que tiene que darse cuenta de ello y seguro que esa eternidad no la tienes que seguir buscando, pues vendra a ti sin darte cuenta. Pero vamos que yo creo que si leemos el Evangelio diariamente llegas a comprender donde nos dice JESUS que nos espera la eternidad a todos.
ResponderEliminarFlori