jueves, 5 de mayo de 2016

EL SÍNODO CON LAS MANOS EN LA MASA SOCIAL ( y 10)

MANOS PARA DAR VIDA

-EL PULGAR: pongo hacia arriba el dedo pulgar para destacar a todas las personas e instituciones de nuestras parroquias porque con su quehacer diario de vida callada, sencilla pero profunda, son las manos de Jesús que se extienden para “levantar da la basura al pobre y sentarlo con los príncipes, los príncipes de su pueblo”
Eliminamos el gesto del dedo pulgar hacia abajo porque si todos vivimos la fe con las manos en la masa social no habrá motivos para repulsas.

-EL ÍNDICE: no señalamos hoy lo negativo sino lo positivo de tantas personas porque nuestra meta está en formar el mundo nuevo al estilo del Evangelio y por eso señalamos con el índice a Jesús, que nos muestra el camino, la verdad y la vida.

-EL CORAZÓN: los grupos sinodales han trabajado el cuadernillo 2 poniendo en los debates toda la reflexión, el alma y todo el corazón ante tanta problemática social que nos desborda. Todos salimos reforzados porque hemos abierto un espacio mayor para acoger en el corazón el grito de dolor de los más pobres en sus diferentes modalidades. La experiencia de los grupos sinodales  nos hace crecer en la fe con el espíritu de poner en común los bienes como hicieron los primeros cristianos.

-EL ANULAR: ponemos el anillo al reconocimiento de todas las personas y grupos que no han salido en estas páginas pero que están ahí con las manos en la masa en la pastoral con los presos de la cárcel, con las asociaciones de Personas con Discapacidad de Coria y Comarca, con los emigrantes de Suma2 y refugiados, con las mujeres de la calle, con los enfermos y vagabundos, en proyectos de cooperación internacional, en los roperos y comedores sociales… en definitiva con sus manos llenas de anillos sin que se les caigan los anillos de las manos porque siempre están con el brillo de quienes promueven la vida.   

-EL MEÑIQUE: es verdad que queda todavía mucho por hacer, muchas vidas pequeñas por promover, muchas personas insignificantes a las que elevar a la categoría de la dignidad que nunca deben perder. Quedan muchos hermanos pequeños, débiles e indefensos por proteger y defender. En ello estamos y seguiremos con las manos en la masa social dando pequeños pasos pero siempre al estilo de quien sigue las huellas del Evangelio que nos marcó el Señor.

Yo termino esta serie de artículos. Si estas reflexiones te han servido para descubrir la dimensión social de la fe cristiana junto a tu comunidad, me doy por satisfecho. El resto es cosa tuya para que tus manos sigan dando vida metiéndote en el corazón de las masas.

Gracias por seguir cada semana esta columna.


TINO ESCRIBANO RUIZ


2 comentarios: