EL DESTORNILLADOR
-UTILIDADES: Sirve
para apretar y para aflojar tornillos en sus diferentes modalidades y tamaños.
Aunque su esencia sea la misma, ha evolucionado según las exigencias de los
nuevos tiempos.
-LA AVERÍA : está provocada por
el mal uso de la palabra laico. Es de origen
griego y antiguamente la utilizaban para diferenciar al pueblo, o sea los
del montón, en contraposición a otro tipo de personas con reconocida categoría;
pero como todavía no conocían a Jesús no se arregló nada.
-NUEVO ATASCO: cuando
los cristianos llegaron a Roma aprendieron el latín y utilizaron el término “seglar”
para diferenciar a las personas que trabajaban duro en las cosas del siglo (las mundanas), o sea los del pueblo,
los del montón... había “otros seglares”
pero no se planteaban estas cosas, y eso que conocían la doctrina de Jesús pero
permanecieron con los tornillos flojos.
En otro contexto estaban
los que tenían muy claro que toda autoridad viene de Dios pero que la repartió
para gobernar en dos mitades: las “cosas
del mundo” para los seglares, y las “cosas
del Cielo” para el clero y los monjes.
Con el paso del
tiempo muchos se dedicaron a las “cosas del cielo” huyendo del “mundanal
ruido” para santificarse en los conventos o ejercer cargos en instituciones de
la iglesia dedicadas a gobernar en la
tierra las “cosas religiosas” del cielo.
Otros seglares de alto rango: reyes y príncipes, también se
metieron a gobernar las “cosas del cielo”. Se arreglaron muchas averías pero el “pueblo llano” siguió sometido a los
unos y a los otros.
-SOLUCIONES TÉCNICAS: En nuestro vocabulario religioso castellano actual
se utilizan las dos palabras, laico y
seglar. Sin embargo, el contenido ha sido afianzado en la teología renovada
por el Concilio Vaticano II, pues se destaca que el Bautismo nos da a todos la misma dignidad de ser Pueblo de Dios con la
misma misión sin diferencias de poderes sino por el servicio específico de
transformar el mundo al estilo del evangelio de Jesucristo. Nos queda mucho
por atornillar y desatornillar, pero con las reflexiones y propuestas del
cuaderno número 3 del Sínodo, avanzaremos.
-NUEVA AVERÍA: La
palabra laico tiene también un uso civil
no vinculado a lo religioso y, a veces, muy contrario; pero eso lo dejaremos para la próxima
herramienta.
¿Qué
“tornillos” hay que apretar o aflojar
para afianzar el concepto de laico cristiano?
Envía tus
aportaciones a florentinoescribano@yahoo.es
Hasta la próxima semana.
Tino Escribano Ruiz
No hay comentarios:
Publicar un comentario